Mis amigos


Autorretrato en tres colores
mB
Alejandro Forero
The open list
El tatuaje falso
Hesitant Aranta
Nimie...dad
Aquí y ahora
Doblepensar
Twisted Reality
Bluelephant´s ballad
Leda and the swan
Sub-realidades
El resto es selva
Algunas cosas de muchas otras
BE ORAL
Kaleth´s sound of love



 



 
En archivo

<< current

Das Michín Review
 
martes, marzo 01, 2005  

Closer




Everything is a version of something else


Dejar de escribir. Todo lo que se busca ya est� ah�, afuera, escrito sobre alguna pared, simplemente esperando para ser le�do 4 a�os despu�s. La historia puede remontarse muchos a�os atr�s o simplemente haber sido escrita hace algunos minutos, no importa. Y sin embargo, la historia de cada persona prefiere ser contada desde afuera, reflejada en uno de los cientos de espejos de las escaleras en al entrada, de segunda o tercera mano, el reflejo de un reflejo de un reflejo... Prefiere, siempre, estar escrita por alguien m�s, so�ada, talvez, vigilada por una c�mara oculta en el techo.

Closer es una pel�cula perturbadoramente simple acerca de cuatro extra�os que tratan de conocerse unos a otros sin �xito. Sus tr�gicas relaciones, toda su tristeza, parecen pasar intermitentes frente a una c�mara fotogr�fica, una de esas Pinhole, de tal manera que podemos ver tan s�lo largas exposiciones con mucho tiempo entre una y otra, im�genes deformadas de una verdad que desde el principio dudamos que exista, la vida real de una desnudista, un novelista fracasado, una fot�grafa y un dermat�logo. La versi�n que sus di�logos cuentan, sin embargo, parece extenderse incluso a esos momentos en los que la c�mara est� cerrada y el fot�grafo pone un nuevo rollo, un set de polaroid; de nuevo, no se sabe si quiera si se puede creer en ello. El pelo crece, s�, y cambia de color, los rostros cambian y envejecen, entristecen como si cada vez esperaran menos del papel que les ha tocado representar, de su relaci�n con los dem�s, del reflejo con el que se habla de su vida. A�n as�, no hay nada que nos autorice a creer que sigan existiendo mientras no se exponen sus im�genes ante una pel�cula sensible; entre tanto podr�an devolverse a Nueva York, escribir otro libro o cerrar sus ojos caf�s ante el azul intenso de un acuario. En tanto versiones, existen tan s�lo como acaecimientos de algo m�s en le momento en el que son representados, cuando el espectador (el guardia de seguridad, el empleado del hotel, el asistente a al exposici�n, yo) cierra los ojos podr�an incluso deja de existir, no podr�amos impedirlo.

Yo, por mi parte, no lo har�. Seguir�, fascinado, creyendo en esta versi�n, consider�ndola tan verdadera como cualquier otra, abriendo y cerrando la c�mara justo cuando el director me lo diga, asistiendo a su exposici�n, intermitente. La verdad, que seguramente est� all� afuera, me importa tan poco como el enga�o, tan poco como su verdadero nombre o el color real de su pelo, tan poco como todo lo que ocurri� mientras las enormes puertas de vidrio estuvieron cerradas entre los dos.

Permalink 2:41 p. m.



 
This page is powered by 

Blogger. Weblog Commenting by 

HaloScan.com